En el sector de las Smart Cities, Barcelona es considerada la Meca del mundo. Allí se celebra desde 2011 el Smart City Expo World Congress y es un claro líder mundial en este campo. Incluso la propia ciudad es pionera en la introducción de una serie de innovaciones urbanas, como contenedores inteligentes, metros autónomos, refugios climáticos o las llamadas supermanzanas: zonas cerradas al tráfico motorizado que devuelven el espacio urbano a las personas y crean un entorno inclusivo para el desarrollo de la vida comunitaria. La República Checa ya tuvo exploradores en Barcelona en el pasado. Los más destacados fueron la capital, Praga y la empresa de Zlín Incinity, proveedora de la plataforma de integración urbana Invipo, que ya se utiliza en ciudades no sólo de la República Checa, sino también, por ejemplo, de Portugal, Turquía, Georgia y Omán. Sólo en esta decimotercera edición de la feria «ondeó» por primera vez la bandera checa.

Sin embargo, los checos consiguieron compensar los largos años de ausencia en la competición mundial con esta única participación. "El equipo checo en Barcelona destacó en todos los frentes y regresó a casa con dos títulos mundiales y otros valiosos logros, lo cual es una gran noticia", afirmó Lukáš Vlček, ministro de Industria y Comercio. Y añadió: "La colaboración efectiva entre los sectores público y privado es clave no solo para la creación de ciudades inteligentes, sino también para fortalecer la posición internacional de la República Checa. Por eso valoro que bajo el éxito de la misión checa en Barcelona figuren de manera destacada las ciudades de Praga, Brno y Pilsen".

La presencia visible de la República Checa en eventos clave en sectores estratégicos innovadores, como la Smart City Expo de Barcelona, va de la mano con el cumplimiento del principal objetivo de la Estrategia Económica: que la República Checa entre en el top 10. Se trata de una forma directa de reforzar su posición en los mercados mundiales y aumentar la competitividad de la economía checa a través de la innovación y el alto valor añadido. La participación en Barcelona ha demostrado que, en algunos ámbitos, la República Checa tiene potencial para apuntar incluso más alto que el top 10 de la Unión Europea, y las Smart Cities son un buen ejemplo de ello.

Las startups en el punto de mira 

El objetivo de la participación en Barcelona era, ante todo, abrir las puertas al mercado mundial a innovadores checos y a sus soluciones prometedoras, cuyas start-ups suelen estar llenas de obstáculos, debido también a la dimensión B2G de los proyectos de Smart City. En el stand checo se reunieron 30 empresas innovadoras y departamentos universitarios en 308 m2 de los cuales la mitad eran startups. VisionCraft, con sede en Brno, cosechó un éxito notable al ganar el concurso mundial de startups (Global Startup Pitch Competition) organizado por la North Texas Innovation Alliance, con sede en Estados Unidos. Gracias a su primer puesto en la competición de 30 participantes, se llevarán un premio en metálico de 15.000 dólares del Curiosity Lab y un incentivo para una misión de exploración a Texas. Y es que los estadounidenses están interesados en que los «ojos inteligentes» checos, que detectan objetos y recogen datos sobre ellos, vigilen las ciudades americanas y se desarrollen también en Estados Unidos. "Para una pequeña start-up tecnológica como la nuestra, la expansión extranjera es un desafío financiero y de capacidad. No podemos permitirnos el lujo de hacer experimentos a ciegas, por eso hasta ahora nos hemos centrado principalmente en los mercados checo y europeo. Pero el resultado del concurso nos dio una señal clara de que nuestra solución tiene potencial global, y los contactos con importantes socios de EE.UU. obtenidos en Barcelona nos abren la puerta para entrar en el mercado americano", afirma el director general y fundador, Robert Pinkas. 

Pero no sólo las start-ups estaban contentas, ya que SCILIF, con sede en Praga, se llevó a casa una recompensa en forma de interesante contrato. Su exclusiva tecnología de iluminación SUNFIBRE, que mejora la visibilidad en condiciones de poca luz, formará parte a partir de ahora de la ropa de trabajo del personal de los aeropuertos británicos para mejorar la seguridad del tráfico aéreo en ellos. Otros expositores checos también tienen ambiciones internacionales, como Data From Sky de Brno con análisis de vídeo mediante IA, Fly4Future de Praga con drones autónomos, Jalud Embedded de Pilsen con detectores de sonido y RoadTwin con una aplicación de modelado de tráfico. Estas nuevas empresas tienen como denominador común la cooperación con la empresa sueca Axis Communications, líder mundial en el segmento de cámaras de red con 4.000 empleados en más de 50 países.

Al comienzo de la feria, David Müller, Director Jefe de la Sección de la Unión Europea y Comercio Exterior del ministerio de industria y comercio, y principal abanderado de la delegación checa de este año, se reunió con sus representantes. El objetivo de la reunión era sentar las bases para una cooperación que, por un lado, facilitaría a Axis Communications la búsqueda de start-ups prometedoras en el mercado checo y, por otro lado, ayudaría a estas empresas emergentes a internacionalizarse a través del mercado sueco. También se realizó una entrevista sobre este tema con representantes de la multinacional estadounidense NVidia, con la cual el citado Data From Sky ya ha implementado varios proyectos en diferentes partes del mundo. Entre los logros más recientes de esta cooperación se encuentra un contrato para proporcionar análisis de vídeo para hasta 560 intersecciones de carreteras en Florida. 

Premio al expositor más sostenible 

El mayor éxito colectivo de los checos llegó en la segunda jornada, el segundo de los tres días de exposición. Representantes de la administración ferial de Fira Barcelona visitaron el stand nacional con una placa de cartón verde y un trofeo con un esqueje de pino. Significaban que el pabellón checo había ganado un premio especial al expositor verde por su sostenibilidad en un océano de más de 1100 expositores de 130 países. Esta práctica está fuera de lugar en la industria ferial per se, pero tiene su justificación en la Smart City Expo. Al fin y al cabo, la sostenibilidad es el alfa y el omega del concepto de ciudad inteligente, que a menudo se olvida en medio de la avalancha de innovaciones tecnológicas.

La dirección de la feria apreció que la República Checa destacara entre la multitud y liderara e inspirara a la comunidad mundial con su propio ejemplo. En este sentido, la hazaña expositora checa de este año es un guante lanzado que podría influir en la forma de los stands de futuras ediciones del certamen y, por tanto, una oportunidad de negocio para los innovadores checos de la tecnología circular y ecológica, sobre cuyas soluciones se construyó el concepto ganador de este año. Una de ellas es la start-up praguense ReKáva, que se ocupa del reciclaje local y del aprovechamiento de los posos de café. "Al poco de llegar a Barcelona tuve una desafortunada caída en la calle y me rompí el brazo. Tuve que ir al hospital para operarme y pensé que había perdido el evento para el que me había estado preparando durante todo el año, así como todas las citas programadas. Pero después de ver nuestra exposición nacional, los socios quedaron tan impresionados que estuvieron dispuestos a ir a verme al hospital. Gracias a la Expo, finalmente conseguimos un representante de ventas español y estamos redactando un contrato para la distribución de nuestros Growkits elaborados con posos de café", explica la fundadora Jana Šrámková, describiendo uno de los beneficios comerciales inmediatos de la espectacular y bien pensada presentación checa.

El concepto de participación sostenible lleva casi un año gestándose. Al principio, hubo un intenso intercambio de ideas con socios de Brno, Praga y Pilsen, seguido de un intento piloto por parte del MPO de contratación circular. Aquí ganó, entre otras, la empresa Veletrhy Brno, el organizador del evento de innovación urbana más importante y este año radicalmente transformado para la innovación urbana en suelo nacional URBIS The Smart Cities Meetup, que incorporó en su propuesta las ideas del Instituto de Economía Circular y de varios otros expositores checos. La visión de los coloridos envases en el suelo y de las paredes acartonadas del stand alertó de inmediato a los visitantes de que los checos tenían algo distinto a lo habitual en las ferias. Detrás de ambos elementos se encontraban los paneles de construcción PackWall, fabricados en Milevsko con tecnología patentada a partir de envases de cartón para bebidas.

En la exposición se complementaban con tableros de los «carpinteros del plástico» de Brno, Plastic Guys. Lo que en su día fueran trozos de frigoríficos, ratones de ordenador o restos de impresiones 3D se transformó en una sala de reuniones común, un bar y mesas de café hechas con cajas de bebidas. Los visitantes se sentaron en el colorido sofá Foamy del taller del estudio de diseño ecológico Balance is Motion, creado a partir de restos de espuma de la producción de esteras y cáscaras de arroz. Además de la oportunidad de hablar sobre la cooperación con los expositores checos, un gran atractivo para sentarse fue también la degustación de cócteles originales en un bar que ya no existe. Los visitantes pudieron llevarse como recuerdo la porcelana de segunda mano en la que se servían los cócteles. Así, las viejas piezas polvorientas de los estantes de nuestras abuelas no solo encontraron un nuevo uso, sino que ahora han viajado por el mundo como embajadoras de la creatividad, innovación y sostenibilidad checa.

Trabajo en equipo y sinergia entre varias ciudades checas 

Además de una serie de récords y primicias, la participación checa en Barcelona también trajo consigo una cooperación institucional sin precedentes que traspasó departamentos, ámbitos clásicos y niveles. Las capacidades de las empresas checas se escudaron bajo el paraguas de las exposiciones nacionales de los Ministerios de Industria y Comercio, Desarrollo Regional, Transporte, Medio Ambiente y Asuntos Exteriores. A ellos se unieron las ciudades de Praga, Brno y Pilsen, cuyos ecosistemas locales de innovación son los viveros de la mayoría de las soluciones presentadas por la República Checa en la Smart City Expo. «Sabemos que nuestras capacidades en el campo de las ciudades inteligentes son diversas y a menudo únicas en el mundo. Sin embargo, hasta ahora no habíamos sido capaces de conectarlas y mostrarlas juntas, lo que nos ha impedido destacar entre la multitud. Por eso llevamos más de tres años realizando una intensa labor de coordinación bajo el estandarte del proyecto City For The Future, creando una «nación» de ciudades inteligentes fuerte que sea capaz de competir a escala mundial. 

Los frutos cosechados en Barcelona confirman que avanzamos en la dirección correcta y señalan el camino para otros sectores y ámbitos», afirma David Müller, Director Principal de la Sección de Unión Europea y Comercio Exterior del Ministerio de Asuntos Exteriores. El éxito checo en la Smart City Expo -como la verdadera innovación- no fue fácil. Un año de preparación por parte del equipo del proyecto supuso el envío de miles de correos electrónicos, la coordinación de varios centenares de partes interesadas, decenas de reuniones presenciales y en línea y dos talleres de coordinación de media jornada. Sin embargo, fue el variado mosaico de ideas, potenciado por la diversidad de antecedentes de los actores y la sana competencia entre las ciudades, lo que propició el torbellino creativo checo, que a la postre resultó ser una ventaja competitiva decisiva en la escena mundial. Si el visitante aún podía esperar que el encuentro con el alcalde Bohuslav Svoboda tuviera lugar en un banco de una parada de transporte público de Praga, se vio definitivamente privado de un discurso por la cerveza pilsner servida por un grifo robotizado del taller de la CTU, y sólo pudo contemplar incrédulo los asientos del bar fabricados con la parte trasera recortada de un viejo Mercedes-Benz 190 que antaño surcaba las calles de Brno.

"Con cálculos muy sencillos llegamos al hecho de que, como checos, no tenemos lo necesario para superar a los EE.UU., Alemania, China o Arabia Saudita en el tamaño o la magnificencia de nuestra presentación. Si queremos estar entre los líderes, debemos crear nuestra propia categoría de competición en la que sorprenderemos con originalidad y un enfoque creativo que, como Svejk, deje a los demás con la duda de qué queremos decir y qué es ya una hipérbole», así describe Miroslav Scheiner, Director de Proyectos Especiales del MPO, la filosofía general que subyace al éxito de la Barcelona checa. Y concluye: «Es esencial que detrás de este marketing inteligente haya siempre capacidades concretas, reales y fuertes, que intentamos señalar. De nada sirve llamar la atención si no tenemos con qué retenerla, y eso es una cuestión de contenido. Por eso debemos continuar nuestra labor de coordinación y seguir construyendo ecosistemas sectoriales con ofertas industriales coherentes respaldadas por historias individuales interesantes y proyectos de referencia.» 

Para más información sobre la participación checa y los expositores individuales en Smart City Expo World Congress 2024, visite www.cityforthefuture.com