Con su economía basada en la exportación, la competitividad y las oportunidades de exportación son clave para la prosperidad futura de Chequia, por lo que la diplomacia económica es una parte importante de la agenda del Ministerio de Asuntos Exteriores. El ministro en su discurso afirmó que es esencial que Chequia responda a los cambios que se están produciendo, ya sea el impacto del "Green Deal" en la industria automovilística checa o la necesidad de reducir la dependencia energética del país de Rusia. En la próxima década, la economía checa, basada ahora los combustibles fósiles, debe transformarse en una economía moderna, ecológica y competitiva. El país hoy día está entre los 27 mayores exportadores y los 28 mayores importadores del mundo.
Según el gobierno, ahora es el momento de establecer una marca checa respetada. Es decir, una marca que sea basada en la fiabilidad, la invención y el valor agregado. Para ello es esencial que la economía checa pase del ensamblaje al diseño. Las exportaciones de Chequia se han basado durante mucho tiempo en la subcontratación de bajo valor agregado. 
Para lograrlo será necesario reforzar la posición de las universidades checas e impulsar el potencial de la mano de obra mejorando las condiciones de trabajo. Además de eso, hay que crear un sistema flexible de migración laboral para atraer a trabajadores extranjeros cualificados de otros Estados. El ministro Lipavský también acentuó la necesidad de reducir la dependencia del país de las fuentes de energía rusas, reforzar los lazos transatlánticos y buscar nuevas oportunidades de exportación en India, África y Extremo Oriente.